Como parte del proceso educativo recibimos automatismos y programación
de conductas, que son la parte visible del sistema de creencias en que se basa quién creemos ser. La estructura de nuestro
diálogo interior, es una resultante del conjunto de creencias que nos representa.
a través del cual nos convertimos en personas optimistas (tolerantes
a la frustración) o pesimistas sin visión de futuro.
El comportamiento humano se encuentra controlado, no sólo por el programa de refuerzos externos existente, sino que también por el estado mental propio de cada individuo, las explicaciones que las personas se dan, esto es : la pauta explicativa. La estructura de la pauta explicativa personal es fundamental para determinar si una persona es optimista o pesimista. Los estudios indican que una persona se enfrenta a una situación de éxito o fracaso, tiene 3 dimensiones que lo respaldan, estos son :
La pauta explicativa de una persona pesimista para hechos :
La pauta explicativa de una persona optimista para hechos :
Esta
herramienta, que se presenta a través de un test, nos permite diagnosticar
el ambiente de tolerancia a los cambios y al enfrentarse a fracaso
sistemático (ventas, liderazgo y otros).
Es una realidad científica que el pesimismo y el desamparo es un logro personal aprendido durante nuestra etapa de formación. El convencimiento inicial de una persona puede verse dramáticamente afectado al enfrentarse a un ""fracaso" en los primeros intentos. Lo preocupante es que incluso aunque el fracaso sea previsible (rendimiento en ventas por ej), el desamparo aprendido hace sus estragos en la persona. De entre los pesimistas están los que tienen mayor rotación de personal, menores ingresos en ventas, y menores resultados en funciones que el éxito parcial es importante (desarrollo, ventas, profesores, liderazgo, etc).
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